Tenemos dos espacios interiores
También hay una terraza cubierta y acristalada que tiene climatización
En cualquier tiempo del año tenemos la capacidad de mutar para adecuarnos al clima dentro del restaurante. Puedes encontrar un sorprendente refugio los días fríos junto a la playa. Nuestros comedores interiores tienen una naturaleza cambiante, en invierno son como un hogar con su estufa de leña y una sensación intima y relajada, en verano las puertas y ventanas permanecen abiertas y una brisa característica de esta costa inunda el interior, es el viento llamado «llebeig» que siempre llega para refrescarnos en los días cálidos.
¡No te lo vas a creer! Hay días en invierno que requieren un lugar cálido y confortable .
Aquí tendrás una sorpresa si has venido en verano: todo es diferente
¿No estás seguro de qué vas a hacer en invierno? Nosotros somos una alternativa, paseo playero bien abrigado y paella en un sitio especial.
Desde cualquier punto de la Costa Blanca, tendrás un lugar y podrás saber donde hacer una buena comida especial
En cualquier temporada tenemos una mesa en los comedores interiores para comer un buen arroz, como el negro, por ejemplo.
Una entorno para cada temporada
No importa si hace frio o calor, estamos preparados
La mutabilidad o la capacidad para cambiar con respecto al clima es una necesidad de las personas. Cambian nuestras actividades, nuestra forma de entender el ocio, nuestra ropa y muchas cosas más. Sin embargo, una buena paella es idéntica cualquier día del año. Nuestros espacios se transforman para el confort de una buena comida y las terrazas se recogen para dar paso a los lugares cálidos de interior.